Otro día que me despierto tarde. No quiero que sea una rutina, pero me encuentro demasiado cansada comparado a lo normal. Aun cansada, conseguí levantarme de la cama y arreglarme. Chantelle y yo no habíamos planeado nada para hacer durante el día, sin embargo, al ver que el día se nos iba y no lo estábamos apreciando al máximo, se nos ocurrió ir al centro comercial Los Arcos con nuestra compañera de Erasmus, Desi. Ahí nos pasamos un rato de tienda en tienda y paramos en un restaurante llamado Pomodoro. Esa tarde, entre las tres, nos apetecía conocer Sevilla un poco mejor y decidimos ir en metro hacia Puerta Jerez donde se localizaba la Torre del Oro, justo al lado del Río Guadalquivir. Era mi primera vez visitando este monumento emblemático de Sevilla, pero la sensación de estar al lado del río por la noche, rodeada de luces, no se me olvidará.