Aventuras

Esta semana no fue muy distinta a la semana anterior, las clases comenzaron y me parecen muy interesantes, especialmente la de Documentación Aplicada a la Traducción.

El martes nos despertamos temprano, ya que mi compañera tenía que resolver un tema en el banco Bankia, el cual se encontraba en el Nervión. Sabiendo que teníamos que estar en la universidad hasta las cuatro de la tarde, decidimos dar un paseo por aquel lugar e intentar almorzar. Encontramos una gema escondida en un callejón detrás del Corte Inglés, llamado Tommy Mel’s Diner. El lugar me recordaba a los restaurantes americanos, como aquel que salió en la película Grease. Se me pusieron los pelos de punta al entrar por la puerta porque siempre había querido visitar un restaurante americano retro, ya que me parecían únicos y también porque me gustaba mucho la película Grease. Al terminar de comer, nos dirigimos a la universidad para nuestra clase de Aspectos Descriptivos y Normativos del Español Actual. Al terminar la clase…nos dirigimos al gimnasio.

El sábado decidimos quedar con nuestra compañera Dessi y la llevamos a comer a Tommy Mel’s Diner. Durante la semana le contaba que era lo mejor de lo mejor y que la comida era estupenda. Las dos decidimos probar las hamburguesas, mientras que Chantelle pidió un gofre con pollo. Suena raro, pero ella insiste que es lo mejor que se ha comido en su vida. Cuando ya no nos quedaba comida en el plato, decidimos visitar la Plaza de España. Hace muchos años que no había estado ahí, no obstante, sigue igual de hermoso. Durante la Feria de Sevilla esta plaza se convierte en algo mágico, el cual no puede ser explicado con palabras.

Esta semana me a costado un poco más de lo que me había imaginado. Con esto quiero decir que me está dando ahora que no estoy con mi familia y no estaré con ellos durante mucho tiempo. Sé que esta experiencia será completamente diferente a Barcelona, ya que, verdaderamente, no estaré sola, ya que tengo la familia de mi madre aquí, pero no es igual si no tengo a mi madre. Jamás he venido a Sevilla sin ella y, en verdad, es muy diferente. Ella me asegura que todo estará bien y que lo disfrutaré, y sé que lo que dice es verdad, pero es normal que lo pase mal, aunque solo sea un poco. Para animarme un poco, mi compañera y yo hemos estado haciendo una lista, y una bastante larga, en la cual anotamos todo lo que queremos hacer en estos pocos meses que tenemos. Por ahora, tenemos anotado visitar los diferentes monumentos de Sevilla y, si se puede, visitar Cádiz, Málaga y Córdoba. Parece mucho, pero si nos ponemos las pilas, sé que podremos. Eso sí, primero los estudios y, luego, el cachondeo. Así me lo dice mi familia. Bueno, pues, ya os iré contando si hemos agregado otra cosa a la lista o si hemos podido hacer por lo menos una de ellas. Crucemos los dedos.