Finalmente conseguí escapar del calor. Tomé un tren temprano de Sevilla Santa Justa y fui a Cádiz. Esta podría ser mi última oportunidad de nadar en el océano. Adoro los trenes en España. Son tan cómodos y bien mantenidos en el contrario de los de Polonia. En Cádiz decidí tomar el autobús turístico para ver todas las atracciones. Aprendí mucho. La segunda expedición de Cristóbal Colón a América fue de Cádiz y una vez fue una de las ciudades más importantes del Imperio Romano. Me bajé en Playa Victoria y nadé en el océano. Hacía calor. Luego tomé un largo paseo por la playa. Para la cena me tuve la paella famosa y estaba deliciosa. Caminé un poco en el centro y volvé a casa. Estoy tan contenta que Sevilla está situada cerca de tantas ciudades para poder visitar tantos de ellos.