Las Apariencias Engañan

Semana 18 a 24 Febrero – esta semana tenemos varias cosas planeadas, primeramente quedar con nuestro grupo para planear como vamos a compartirnos la presentación. La verdad es que estaba un poco nerviosa quedar con ellos ya que no hemos hablado con ellos antes, solamente cuando nos pusimos en el grupo. Tampoco tenía una buena imagen de ellos ya que ya que al principio parecían bastante inmaduros, bueno la clase en general ya que se sentaban en las mesas, envés de hablar gritaban y no prestaban mucha atención a lo que los otros estudiantes exponían durante las presentaciones, es  decir, yo ya tenia mi idea hecha sobre mis compañeros, y se que no debería, como se dice “las apariencias engañan” y esta vez si que me engañaron, porque a pesar de sir inmaduros en un ambiente social , eran bastante maduros a la hora de trabajar. Al entrar al aula para trabajos en grupo, el cual esta situado encima de la biblioteca,  todos teníamos las mismas ideas  de cómo hacer esta presentación lo cual me pareció genial ya que no habrá ninguna confusión aunque también es bueno tener diferentes ideas. Aparte de ser maduros eran muy simpáticos, lo cual me confundió ya que las ultimas semanas solo se acercaron para el trabajo en grupo y no sonreían en clase cuando se les sonreía, pero bueno a lo mejor les daba vergüenza. En fin, nos repartimos el trabajo y nos marchamos a casa.

El fin de semana mi compañera y yo nos fuimos a Córdoba, y honestamente puedo decir que ha sido una experiencia inolvidable. De camino a Cordoba, estábamos un poco nerviosas por que no nos queríamos perder en el camino de la estación a el hotel, pero afortunadamente no hicimos, simplemente seguimos el trayecto que nos mostró Google maps y llegamos en quince minutos. para llegar al hotel tuvimos que atravesar un parque, el cual era precioso, tenía una camino el cual estaba alineado con naranjeros preciosos.

Cuando llegamos a la recepción del hotel nos sorprendimos porque era precioso, era de cristalera y a la entrada había un gran bouquet de flores y el ascensor era de cristal y podíamos ver lo que había alrededor del hotel. también el personal era muy amable. Nuestra habitación era impresionante, cuando entras, te encuentras con un vestidor y el lava mano con un gran espejo, luego caminas hacia delante por un pasillo en el que esta un baño e un bide y al otro lado del pasillo esta la ducha y una bañera. Al final del pasillo esta la habitación, una gran cama con un sofa, television y escritorio y la mejor parte es la ventana, bueno la cristalera, envés de poner una pared, pusieron una gran ventana, me encanta porque deja entrar mucha claridad.

A la noche salimos a un restaurante japonés, y la comida estaba buenísima, yo me pedi oshiro maki, california roll, ebi de salmon y tallarines. pedí tanto orque no había comido desde el desayuno y me quede muy satisfecha.

También visitamos el Alcázar de los reyes, lo cual es una autentica preciosidad con sus jardines hermosos y desde la parte de arriba del castillo hay unas vistas preciosas.

La calle de las flores me encanto ya que habían helechos colgando por los dos lados y cuando atravesabas el pasillo solo olías flores.

Visitamos los patios.

 

La mezquita es un verdadero tesoro. al entrar sientes un aire frío y notas que todo es muy oscuro pero luego, vez un gran espacio con columnas las cuales son todas diferentes. también puedes ver que la construcción fue precisa para permitir que suficiente luz entrase. La parte más impactante fue como construyeron la iglesia católica la iglesia justo en el medio. No sé cómo describir este lugar con palabras, honestamente tienes que visitarlo porque hay mucho que ver.

 

En adición cruzamos el puente de Roma.

Espero poder visitar Córdoba otra vez ya que nos quedan varios sitios que no habíamos planeado en visitar, por ejemplo la Sinagoga. Lo mejor de esta excursión es que caminamos a todos sitios. Si nunca has visitado este lugar y solo lo has visto por fotos aconsejo que vengas ya que las fotos no capturan la belleza de este lugar.¡Espero volver pronto!