Me encantaba muchísimo este fin de semana con mis amigos, hubo un gran sentido de la aventura. Yo y Anna, fuimos a Málaga antes de los demás porque no quisieron ir de los dos días. El viaje empezó con mucha ansiedad, no me he sentido nunca tan preocupado por mi vida. Como todo los estudiantes, intentamos a buscar los viajes que son más barato y rápido, por lo tanto, decidimos viajar a través de un Blablacar. Para mí, este idea de viajando con un desconocido es absolutamente loco. No obstante, he experimentado dos experiencias distintas; la que no vino el conductor y la otra que fue un viaje muy relajada y lo pasé bien tiempo con los pasajeros. Este viaje cambió mi razón para siempre porque el conductor fue muy irresponsable y condujo utilizando su móvil mientras viajando más rápido del límite de velocidad en la autopista. Anna, mi amiga tuvo mucha miedo pero no me quiso decir nada para que yo no me sintiese preocupado. Después de este viaje, nos hablamos sobre el viaje y con un sentido de alivio, nos reímos muchísimo. Se pude decir hoy que no utilizaré Blablacar nunca. Bueno, nos marchamos al piso de Chelsea y vive muy largo de la estación. Me hice mucha feliz cuando yo la vi dado que no le he visto en mucho tiempo. Más tarde, aquella misma noche, fuimos al centro de Málaga y a mi ver, fue bellísima porque no hizo calor, no hubo mucho turistas y vimos la puesta del sol. Este día para nosotros fue un día de descansar porque había sido un largo día. Luego, nos dio un saludo y me hizo feliz porque no le he visto en un largo tiempo.
El segundo día, fuimos a la Alcazaba y no nos costamos mucho dado que pagamos por los billetes estudiantiles, creo nos costamos 1.50€ algo así. Después de haber visitado los jardines de la Alhambra, no tuvo comparación con la que la belleza y grandeza que he visto en Granada. No me malinterpretes, la Alcazaba ofrece vistas hermosas de la cuidad pero a mi juicio, no es nada especial. Nos marchamos al puerto, y no me parece que hay mucho hacer ahí sin gastar dinero para comer. Luego, la playa no me gusto desde la harina no está limpio, quizás es la causa de tanta gente y turismo. Me parece que, en comparación con Cádiz en total, esta experiencia ha hecho que aprecie más las cosas porque es más tranquilo y el que casco antiguo es más hermosa. Creo que, no quiero estudiar en una ciudad tan grande como así, mucho menos vivir ahí. Por la tarde, intentamos comer en una taparía pero la cola estuve demasiado largo y tuvimos tanto hambre, entonces nos encontramos con Sovhi, una chica de nuestro grupo que vino por el segundo día, en un café y regresamos al piso de Chelsea. Cenamos a este taparía, los camareros son muy simpáticos y tuvieron mucha personalidad y sacamos una foto juntos. Anna no tuvo ganas de salir pero, Yo y Sovhi le conocemos muy bien y pensamos que cuando empieza Anna a beber, tendría ganas a bailar. Nuestro plan funcionó y salimos un ratito pero estuve demasiado temprano por salir, por lo tanto no hubo mucha gente.